Aquí estoy!, a lo lejos, en la cumbre del silencio, atado a la noche infinita, reducido a la nada. Aquí estoy!, a la espera del cotidiano cruce de miradas que sonroja mi alma, del intencional tropiezo que aterra mis versos y en gloriosos segundos me hace parte de ti.
Aquí estoy!, necesitado de ese inusual palabreo, que detiene el tiempo y me permite guardar en un recuerdo perfecto tus inquietos gestos, la tonalidad exacta del color de tus ojos, tu celestial aroma, la textura de tu piel, el largo de tu cabello, la dimensión de tus labios, la profundidad de tu alma alegre y lejana.
Aquí estoy!, a centímetros de ti y a kilométros de tu corazón.
Aquí estoy!, necesitado de ese inusual palabreo, que detiene el tiempo y me permite guardar en un recuerdo perfecto tus inquietos gestos, la tonalidad exacta del color de tus ojos, tu celestial aroma, la textura de tu piel, el largo de tu cabello, la dimensión de tus labios, la profundidad de tu alma alegre y lejana.
Aquí estoy!, a centímetros de ti y a kilométros de tu corazón.
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© 2009 Derechos Reservados - Luis Palacios
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